Berliner Tageblatt - Bolsonaro dice que Dom Phillips era "mal visto" en la Amazonía

Bolsonaro dice que Dom Phillips era "mal visto" en la Amazonía
Bolsonaro dice que Dom Phillips era "mal visto" en la Amazonía / Foto: © AFP/Archivos

Bolsonaro dice que Dom Phillips era "mal visto" en la Amazonía

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó este miércoles que el periodista británico Dom Phillips, desaparecido el 5 de junio junto al indigenista Bruno Pereira en la Amazonía, era "mal visto" en esa región por su labor informativa sobre las actividades ilegales como la minería.

Tamaño del texto:

"Ese inglés era mal visto en la región, porque hacía muchos reportajes contra los mineros ilegales, [sobre] el tema ambiental", declaró el mandatario ultraderechista en una entrevista al canal de la periodista Leda Nagle en Youtube.

"En esa región, una región muy aislada, a mucha gente no le gustaba. Debería haber más que redoblado la atención a sí mismo", agregó el presidente brasileño.

Tras diez días de intensa búsqueda, las autoridades han hallado un rastro de sangre en una embarcación del primero de los dos sospechosos detenidos hasta ahora y material "aparentemente humano" que está siendo analizado en Brasilia. También hallaron pertenencias personales como ropa y calzado.

"Por lo que todo indica, si los mataron a ambos, que espero que no, están en el agua, y en el agua quedará poco, el pez come, no sé si hay pirañas allí en Javarí", declaró el mandatario.

Phillips, de 57 años, es colaborador del diario británico The Guardian y autor de decenas de reportajes sobre la Amazonía.

Estaba preparando un libro sobre conservación medioambiental cuando desapareció junto a Pereira, de 41 años, que le hacía de guía.

Ambos fueron vistos por última vez el domingo 5 de junio mientras navegaban por un río del Valle de Javarí, una zona donde actúan narcotraficantes, madereros y pescadores ilegales, situada en el extremo oeste del estado de Amazonas, en la frontera con Perú y Colombia.

La desaparición de Phillips y Pereira suscitó una ola de solidaridad internacional y encendió nuevamente críticas contra el gobierno de Bolsonaro, acusado de alentar las invasiones de tierras indígenas y de sacrificar la preservación de la Amazonía para su explotación económica.

M.Odermatt--BTB